La Generalitat y el Conselh Generau d’Aran han iniciado la captura de ejemplares de urogallo (Tetrao urogallus), una especie amenazada que habita en lugares fríos del Pirineo, para instalarles dispositivos que están conectadas vía satélite, lo que permitirá un control de sus movimientos y necesidades: algo fundamental para planificar su conservación.
La actuación forma parte de una prueba piloto, puesta en marcha el año pasado, que tiene como objetivo mejorar el conocimiento de la especies, especialmente en lugares en donde se desarrollan actividades turísticas y trabajos forestales. La especie ha sufrido un declive del 30% en el Pirineo en los últimos 10 años.
Este proyecto se enmarca dentro del proyecto Interreg financiado con fondos europeos de desarrollo regional, que tiene por objetivo proteger y mejorar la calidad de los ecosistemas pirenaicos y su biodiversidad.
El año pasado se inició la colocación de dispositivos de seguimiento de algunos ejemplares, lo que permitirá tener un control vía satélite de sus comportamientos y movimientos.
En total, se capturaron y marcaron seis ejemplares: cinco machos y una hembra. En concreto, dos en la comarca del Berguedà, uno en el Alt Urgell, dos en el Pallars Sobirà y uno en el Val d’Aran.
Este año la capturas de individuos ya se han iniciado en la zona del Alt Urgell y el Pallars Sobirà y estos días se están llevando a cabo en el Val d’Aran. La actuación se efectúan con el apoyo de los agentes rurales y forestales.
Los dispositivos GPS colocados en los urogallos sirven para realizar un seguimiento mucho más preciso para los animales, y sin molestarles.
Con estos dispositivos, no es necesario estar en el lugar donde se encuentra el animal, como se hacía con los antiguos aparatos de radio-seguimiento, con lo que se evitan las posibles molestias derivadas de la presencia humana en su hábitat.
“También permite tener mucha más precisión en las localizaciones y muchas más localizaciones por día o durante la noche”, señalan técnicos del Departament de Territori i Sostenbilitat.
Los transmisores también dan información de la temperatura y de la posición corporal y de la actividad de los animales, gracias a los acelerómetros que llevan incorporados.
Así se puede conocer por ejemplo los horarios de reposo y actividad o los periodos de incubación de las hembras. Con toda esta información se puede inferir cómo y en qué medida esta especie rehúye las zonas más frecuentadas por el hombre (en pistas de esquí u otros lugares de elevada frecuentación humana) o utiliza las áreas donde se han efectuado trabajos forestales.
El urogallo se encuentra amenazado en la península Ibèrica, y en Catalunya, su población se concentra sobre todo en el Parc Natural de l’Alt Pirineu.
Los machos tienen una tonalidad oscura, con plumas negras en el cuerpo, marrones en las alas y unas irisaciones azul y verde en el cuello y el pecho.
Sin embargo, este animal topa con muchas amenazas: el aumento de las actividades humanas en sus hábitats (especialmente durante los meses de invierno), las actividades forestales, el aumento de las poblaciones de depredadores y ungulados salvajes y los efectos derivados del cambio climático.
Actualmente, en número de machos censados no llegan a los 400 ejemplares en Catalunya. Así en los diez últimos años la especie ha sufrido una regresión de casi el 30 % en todo el Pirineo catalán.
La situación más grave la encontramos en la Cerdanya, donde la reducción de efectivos ha sido del 71%, seguida del Alto Urgell, con una reducción de un 55%, y la Val d’Aran, de cerca de un 40%. En el resto de comarques, las reducciones son menores, entre el 10 y el 20% (Pallars Jussà, Pallars Sobirà, Ripollès), o presentan una situación de cierta estabilidad (Alta Ribagorça, Berguedà).
Esta es una especie frágil, que huye del contacto con los humanos. Por eso, la Associació Paisatges Vius, conjuntamente con la Generalitat, en el marco del proyecto Perifer, ha llevado a cabo una campaña de sensibilización e información, con la edición de carteles informativos, materiales educativos y la colocación de señalización en el entorno de las estaciones de esquí.
