En el marco de su bendición semanal en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco dijo sentir dolor ante "la noticia que llega de Canadá sobre el inquietante descubrimiento de los restos". Además, agregó: "Me uno a los obispos canadienses y a toda la Iglesia católica en Canadá para expresar mi cercanía al pueblo canadiense traumatizado por la impactante noticia".
Sin embargo, no pidió disculpas formales sobre el hecho que implica directamente a la Iglesia Católica. La Escuela Residencial India Kamloops, en donde se encontraron los restos, fue la instalación más grande de este tipo en Canadá y fue dirigida por la institución entre 1890 y 1969.
Unos días antes, Justin Trudeau, el primer ministro de Canadá, había interpelado directamente al Papa pidiéndole que diera "un paso al frente" e instándolo a asumir la responsabilidad.
"Como católico, estoy profundamente decepcionado por la posición que ha tomado la Iglesia Católica ahora y durante los últimos años", dijo Trudeau. Por otro lado, se refirió a la visita que hizo hace varios años al Vaticano donde le pidió al Papa que avanzara "en pedir disculpas, pedir perdón, restituir, hacer que estos registros estuvieran disponibles".
Por otro lado, al darse a conocer las declaraciones del Papa, algunos líderes indígenas de Canadá expresaron su descontento. "Todos estamos dolidos y entristecidos. ¿Quién no? Esto es una farsa mundial", dijo a Reuters Bobby Cameron, jefe de la Federación de Naciones Indígenas Soberanas de Saskatchewan.
Muchos de los líderes indígenas y los sobrevivientes de Kamloops coincidieron en que lo dicho por el Papa no es suficiente y que esperan unas disculpas formales. "El Papa no dirá, '¿Sabes qué? Escuché que hubo (miles de) casos de abuso físico y sexual en esas escuelas residenciales administradas por nuestra iglesia'. No dirá eso", manifestó Saa Hiil Thut, uno de los sobrevivientes.
¿Por qué se responsabiliza a la Iglesia?
Por más cien años, hasta 1970, 150.000 niños indígenas fueron obligados a asistir a escuelas como la de Kamloops que eran financiadas por el Estado y que buscaban asimilarlos a la sociedad canadiense.
En estos lugares, los niños eran obligados a dejar sus creencias y lenguas, reemplazándolas por la fe cristiana y los idiomas oficiales como el inglés y el francés. El Gobierno canadiense ha admitido que en dichas escuelas se llegó hasta el abuso físico y sexual.
En el proceso, muchos de los niños, que eran principalmente de las etnias intuit y métis, fueron enterrados en tumbas sin nombre.
A raíz de dichos hechos, el Gobierno canadiense decidió en 2008 crear un organismo denominado como La Comisión de la Verdad y Reconciliación, que buscaba testimonios sobre los internados indígenas y esclarecer realmente qué ocurrió en dichos lugares.
En el informe que publicó la Comisión, declaró que se cometió un genocidio cultural. Además encontraron que más de 4.100 niños murieron mientras asistían a esas escuelas. Sin embargo, parece ser que los 215 cuerpos descubiertos no se incluyeron en el recuento.
Igualmente, el organismo planteaba 94 recomendaciones, entre ellas una disculpa por parte del Papa. Pero, a pesar de los nuevos descubrimientos, esta no se ha hecho formalmente.
El Papa y las disculpas a las comunidades indígenas
A pesar de que el Papa no ha dado una disculpa directa, no es la primera vez que el pontífice se refiere a los abusos cometidos por la Iglesia a comunidades indígenas de diversos países.
De hecho, en su visita a Bolivia en 2015, pidió perdón directamente a las comunidades por "muchos pecados graves (que) se cometieron contra los pueblos nativos de América en el nombre de Dios".
Siendo así, tanto el Gobierno canadiense como los grupos indígenas, siguen a la espera. Pero, por ahora, no hay una fecha para una visita papal a la comunidad.