Para ellos se ha creado una aplicación de teléfono móvil con el nombre “Kultur-Token” (“Ficha Cultural”, en alemán), que iniciará una fase piloto el próximo 26 de febrero, con mil usuarios registrados e identificados.
En caso de éxito, el sistema se ampliará después del verano a toda la ciudadanía de la capital austríaca, que podrá juntar fichas virtuales por cada 20 kilos de CO2 evitados y que podrá canjear por una actividad cultural.
“Queremos premiar la reducción de emisiones de CO2 con una experiencia cultural“, señaló hoy Peter Hanke, concejal de Cultura y Digitalización de Viena, en la presentación del proyecto.
“Se trata de un proyecto de digitalización único en el mundo, ya que es cultural y medioambiental al mismo tiempo”, destacó el concejal del partido socialdemócrata SPÖ.
En la primera fase del proyecto participan cuatro instituciones culturales públicas, como el Museo de Viena, la sala de exposiciones Kunsthalle, el teatro Volkstheater y la conocida sala de conciertos Konzerthaus.
La aplicación, creada por una compañía asociada al Ayuntamiento de Viena, registra los movimientos del usuario a través un sistema de seguimiento en el teléfono móvil. Para garantizar la confidencialidad de los datos del usuario, el sistema usa tecnología de cadena de bloques (Blockchain).
Los organizadores estiman que una ficha se puede conseguir de media en un plazo de dos semanas por andar, montar en bicicleta o transporte público de casa al trabajo y viceversa.
