El balneario Noctiluca, ubicado a 300 metros del muelle de la ciudad balnearia, dispone de sillas anfibias y soportes para que las personas con discapacidad puedan disfrutar de la arena y el mar.

Crédito: INFOBAE

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Pionero, innovador e inclusivo, desde hace una década el balneario Noctiluca en Villa Gesell es la primera playa integrada del país. Que nadie se quede con las ganas de entrar al mar y disfrutar de la arena, bajo ese disparador nació hace más de un década este espacio 100 % inclusivo.

El parador fue construido para brindar accesibilidad a personas con discapacidad o movilidad reducida junto a sus familia o acompañantes, es por eso que está equipado con rampas extensibles, baños adaptados, carpas gratuitas con asistencia personalizada, bicicletas, sillas de soporte y anfibias.

Esta temporada 2020 abrió sus puertas en diciembre y permanecerá en funcionamiento hasta el 31 de marzo con un horario de 9 a 19.

Este espacio comenzó a montarse en 2007 de la mano de su creador, Marcelo Santurión, con la idea de brindar accesibilidad a las personas con movilidad reducida.

En 2012 fue distinguido por el Ministerio de Turismo de la Nación como parte del Sistema Argentino de Calidad Turística. Hoy llegan desde todo el país para poder hacer uso de sus instalaciones.

El concepto de playa adaptada asegura no sólo la infraestructura ajustada, como son las rampas de 20 metros que conectan la entrada hasta la carpa o los baños con duchas bajas, sino también servicios inclusivos.

En primera medida las carpas son gratuitas. Sólo hay que presentar copia del CUD (certificado único de discapacidad) y la fotocopia del DNI, que le permite el ingreso con tres acompañantes. El balneario comenzó con 8 carpas y en la actualidad cuenta con 20. En la temporada anterior se contabilizaron más de 2400 visitantes.

El punto clave es poder meterse al mar. Cada persona que ingresa en su silla anfibia es asistida por un guardavidas. Las sillas están hechas en aluminio y montadas en ejes de acero inoxidable, tienen flotadores de plástico y ruedas neumáticas.

Otra de las innovaciones es la bicicleta para la playa realizada por el ingeniero Diego Blas. La inauguró Bautista, un chico de 12 años, que nació en Villa Gesell la temporada pasada, y permite circular por la arena.

Esta playa también dispone de textos traducidos a escritura Braille, y el personal que trabaja habla lenguaje de señas. A su vez ofrece un menú apto para celíacos.

Hay actividades recreativas que incluyen: zumba para personas con distintas discapacidades, Surf, Kayakismo, Yoga, talleres de integración por el arte, deporte adaptado, Surf para que todos puedan disfrutar del verano en la arena y en el mar.

Además, el balneario propone hábitos de impacto positivo al medio ambiente: separar los residuos, juntar las tapitas de plástico, y seleccionar envases de PET que son donados a asociaciones.

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