Las imágenes fueron captadas el pasado 5 de julio en una playa de Asukweri (Papúa Occidental, Indonesia) y muestran la nula sensibilidad que todavía persiste en algunas personas ante especies tan singulares y valiosas como las tortugas marinas.
La víctima de este nuevo ejemplo de maltrato a los animales fue un magnífico ejemplar adulto -muy probablemente una hembra en época de cría- de tortuga laúd o baula (Dermochelys coriacea).
Los agresores, un grupo de jóvenes y adultos que descubrieron a la tortuga indefensa en la playa y decidieron divertirse a su costa improvisando una atracción con paseo incluido a lomos del martirizado quelonio.
Uno de los observadores de la salvajada filmó la actividad lúdica y difundió las imágenes a través de internet, provocando una ola de protestas a escala internacional. De momento, no ha transcendido si las autoridades locales han llevado a cabo alguna actuación.
La primera versión del polémico vídeo fue difundida a través de la cuenta de Instagram andrew_chanpapua pero fue retirada de esta red social poco después de que se publicaran las primeras críticas en medios de comunicación.
La tortuga laúd es la especie de tortuga marina de mayor tamaño existente actualmente en la Tierra. Com promedio, los ejemplares adultos tienen 2,3 de longitud y un peso de más de 600 kilos. La Lista Roja de especies elaborada por la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza considera a la tortuga laúd como especie “vulnerable”.
